Se sirven bebidas de buena calidad en el bar inglés. Las habitaciones son nuevas, prácticas y tienen un buen diseño, incluyendo una cama extra. La comida es excelente. El personal es muy servicial y amable. La ubicación es conveniente, cerca de la Iglesia de Todos los Santos.

Este hotel bonito y lindo está situado en una zona preciosa. Las habitaciones son muy atractivas y muy relajantes y tienen baños de buen tamaño. Está en un lugar agradable con vistas atractivas. Hay unos restaurantes maravillosos al lado. Quedarse aquí es una experiencia fantástica...

Una de las cosas que más me gustó de este hotel del siglo XVI es su ubicación en una zona encantadora y tranquila. Está cerca de la parada de autobús, lo cual facilita mucho los desplazamientos. Además, me pareció muy conveniente respecto al distrito de los lagos, ya que pude visitar varios lugares de interés sin tener que hacer trayectos largos.

Todo estuvo bien.

Las camas eran súper cómodas y había un televisor de pantalla plana, una plancha y tabla de planchar, una mesa de trabajo en la habitación. La gente era realmente atenta, superó nuestras expectativas. El servicio fue estupendo, nos sentimos bienvenidos. Edificio precioso, ubicación muy práctica y cómoda no muy lejos de varios lugares, como una parada de autobús y un restaurante. Además, estaba en una zona encantadora.

Una ubicación cómoda para visitar Crewe, cerca del bar/restaurante y del centro. Comida bastante buena en el restaurante reformado en los alrededores. - Habitación funcional y moderna con TV de pantalla plana y canales vía satélite. - Baño grande, cama súper cómoda y dormitorio bonito.

El personal era informativo y majísimo, el hotel estaba muy limpio, el desayuno era excelente. La habitación doble que nos dieron era magnífica y atractiva. El baño era de buen tamaño, era agradable tener una bañera. Los servicios eran muy buenos. La ubicación era agradable, cerca de la iglesia y de la mayoría de las zonas y también de del distrito de los lagos y de fácil acceso. Había un restaurante adjunto cerca.

Nos quedamos en un encantador hotel con una ubicación ideal. Teníamos mesas encantadoras en el restaurante, lejos del jardín de cerveza. La habitación era cómoda y el baño estaba limpio y bien equipado. El servicio fue excepcional, especialmente Nigel en la recepción. El desayuno era delicioso, aunque me hubiera gustado tener más opciones de frutas y yogur natural. disfrutamos de las maravillosas instalaciones y ventajas de la habitación, como la decoración tradicional y la sensación acogedora.

Oda a la tradición inglesa

Ambientes maravillosos y poéticos. Personal amable y superior.- Nigel, el ejemplo de amabilidad

Es difícil recordar algo.